domingo, 27 de mayo de 2007

TERAPIA ECUESTRE

La equinoterapia (terapia con la ayuda del caballo), surgió en el año 1952 en los países escandinavos, a partir de que una joven, Liz Hartal, que a pesar de hallarse impedida por haber padecido poliomielitis, ganó una medalla olímpica de plata en Adiestramiento.
Su triunfo llamó la atención de terapeutas, quienes en la búsqueda de nuevas y más eficaces formas de terapias para enfermedades físicas y psíquicas, estudiaron minuciosamente el evento. Los resultados de sus estudios fueron sorprendentes: encontraron en la utilización de la equitación bajo normas específicas una excelente e innovadora terapia que prometía excelentes resultados.
De Escandinavia, la equinoterapia pasó a Inglaterra y de allí a Estados Unidos de América y a Canadá, donde en la actualidad existen más de 500 centros de equinoterapia que dan servicio a más de 35.000 jinetes y sus familias.
Principalmente son organizados por la North American Riding for the Handicapped Association (NARHA), así como también por la National Center for Equine Facilitate Theraphy.
En nuestro país, la Escuela de equitación Hipocampo estableció un Centro de Equinoterapia en el Club Hípico La Horqueta, en donde actualmente se estan tratando chicos con patología down, parálisis cerebral, motrices, espina bífida, retrasos madurativos y autistas. También en Parque Burnett, en Punta del Este se realizan estas actividades durante el verano, como también Cabalgatas por el bosque, Voltéo y Clases de Salto
La equitación produce excelentes resultados en la rehabilitación de músculos, recuperación o mejoramiento del equilibrio y desarrollo de la autoestima en personas víctimas de accidentes graves (mutilaciones), parálisis cerebral, síndrome de Down y otras discapacidades.
El movimiento armónico del paso del caballo, así como la utilización de la mayoría de los músculos del cuerpo humano al montar, resultan un gran ejercicio para fortalecer aquellas áreas que requieran de una mayor atención, como pueden ser la hipotonía clásica en los niños con síndrome de Down, la falta de equilibrio de la parálisis cerebral u otras lesiones cerebrales menores, así como el relajamiento de los miembros inferiores en personas que requieren del uso de sillas de ruedas. Asimismo, aspectos psicológicos como la autoestima y la seguridad en sí mismo, se ven beneficiados al vencer el miedo e ir obteniendo logros importantes durante las terapias. Otro aspecto que se destaca, es la mejor integración social de las personas con discapacidad al compartir la actividad con niños y adolescentes que no sufren discapacidad "alguna".
Así mismo, aspectos psicológicos como son la autoestima y la seguridad en sí mismo, se ven beneficiados al vencer el miedo e ir teniendo logros importantes durante las terapias. Otro aspecto que se destaca es la mejor comprensión de las personas con discapacidad y su valor como ser humano por parte de personas - principalmente niños y adolescentes - que no sufren de ninguna discapacidad, lo que contribuye a una mejor integración social.
De Escandinavia, la equinoterapia pasó a Inglaterra y de ahí a los Estados Unidos de América y Canadá, donde en la actualidad existen más de 500 centros de equinoterapia que dan servicio a más de 35'000 jinetes y sus familias, organizados en la North American Riding for the Handicapped Association (NARHA) principalmente, así como en la National Center for Equine Facilitad Theraphy (NCEFT).

No hay comentarios: